El Ebro suma 23 hectáreas a su llanura de inundación natural solucionando estrechamientos del río en dos puntos, la Mejana del Conde y el Meandro de Aguilar en el tramo de Osera de Ebro – Fuentes de Ebro (Zaragoza).
El retranqueo de protecciones longitudinales (motas), alejándolas del río, ha sido una de las acciones principales de la Fase 1 de “Mejora de la resiliencia ante las inundaciones en el Ebro” intervención del Proyecto LIFE Ebro Resilience P1, con un presupuesto de 3 millones de euros, que ha ejecutado la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), a través de la empresa pública TRAGSA (ambas socias del Proyecto).
También ha supuesto la creación de un nuevo humedal en este espacio recuperado, donde, además, se realizará una intervención de restauración ambiental que ejecutará +el Gobierno de Aragón, una muestra más de acciones coordinadas entre las Administraciones Públicas.
Como en todas las intervenciones Ebro Resilience, la participación de los sectores interesados, destacando en este caso la de los agricultores, liderados por la Comunidad de Regantes de la Huerta del Ebro, así como el consenso con los Ayuntamientos de Osera de Ebro y Fuentes de Ebro, han sido cruciales para el desarrollo de la propuesta de adaptación impulsada por el instrumento financiero LIFE de la Comisión Europea.
En paralelo a esta intervención, también avanza la ejecución de la FASE 2 que se centra en una de las intervenciones referentes y pioneras del Proyecto LIFE Ebro Resilience P1: la creación de las Zonas de Amortiguación de Flujo Lateral (ZAFL) que plantean reducir el riesgo de inundación en 630 hectáreas de cultivo en la margen derecha del Ebro.
Los trabajos ejecutados durante la Fase 1 han sido:
- Retirada de dique (1.020 metros) en la mejana del Conde y construcción con los mismos materiales, para una intervención más sostenible, de una nueva defensa más alejada del Ebro (998 metros).
- Retirada de dique (2.035 metros) en el meandro de Aguilar y construcción con los mismos materiales, para una intervención más sostenible, de una nueva defensa más alejada del Ebro (1.598 metros).
- Eliminación de especies invasoras para recuperar la vegetación de ribera, principalmente 1,3 hectáreas de caña común, principal especie exótica invasora en la zona.
- Creación de un Humedal (1,4 hectáreas), incluido en el acondicionamiento del terreno para reconectar el río con el soto en el Meandro de Aguilar.
- Reposición de servicios afectados: caminos afectados por el tránsito, tramos de acequia afectada, modificación de línea eléctrica de bombeo, traslado de una estación de filtrado, adecuación de una caseta de bombeo.
Zonas de amortiguación de flujo lateral
Por su parte, la Fase 2 incluye la intervención más novedosa, la propuesta de las ZAFL: creación de una sucesión de 14 zonas de inundación temporal concatenadas que funcionarán como “colchones de agua” durante las avenidas extraordinarias.
Aplica el concepto de adaptación y busca dar espacio al río cuando lo necesita para evitar mayores afecciones. Las ZAFL compartimentan la zona cultivable, un espacio de actuación de 11,30 km de largo y 630 hectáreas, en celdas que se preiunundarán de forma contrada durante los episodios de las crecidas del Ebro. El agua pasa así sobre agua y al no incidir sobre elementos y superficies rígidas, se reducen daños y erosiones.
- Permiten una recuperación más rápida tras una inundación al reducir la erosión y permitir la evacuación del agua después del episodio.
- Disminuyen los costes al reducir los daños en terrenos e infraestructuras durante las crecidas importantes.
La ejecución consiste en la creación de puntos de entrada del agua a través del rebaje de motas (17 rebajes en total); el acondicionamiento de caminos y acequias para los cierres de esas zonas de amortiguación (15 cierres en total) y el refuerzo de las zonas donde se producirá el paso del agua (entubado de acequia, protección de taludes de caminos y cordones de escollera).
En la apuesta por la participación pública, el proceso deliberativo arrancó en 2021 y se intensificó a finales de 2022 con la creación de un grupo estable de participación entre técnicos, representantes municipales y de la Comunidad de Regantes.
Además, se han realizado otras acciones como visitas de campo, rutas guiadas con partes interesadas y con la población general, una sesión pública sobre las zonas de amortiguación y visitas de campo para explicar sobre el terreno las denominadas zonas de amortiguación de flujo lateral destinadas a propietarios o arrendatarios de parcelas que lindan con caminos o infraestructuras de riego.
Junto con estas dos fases, en el tramo Osera – Fuentes, también se está ejecutando por parte del Gobierno de Aragón otra intervención LIFE Ebro Resilience P1, la adaptación del sistema de riego de la Comunidad de Regantes de la Huerta del Ebro (Fuentes de Ebro). Esta actuación, que ya se encuentra en su segunda fase de trabajos, consiste en la sustitución de una acequia existente por una nueva tubería soterrada y más alejada del cauce. Se reducirán las afecciones y los cortes que se producían ante la rotura de las defensas.
Proyecto LIFE
El Proyecto LIFE Ebro Resilience P1 (LIFE20 ENV/ES/00327), aprobado por la Comisión Europea en la convocatoria LIFE 2020, abarca tres comunidades autónomas (La Rioja, Navarra y Aragón), cuenta con una duración de 6 años y un presupuesto total de 13.310.350 €, con financiación europea en un 55%.
Este proyecto es, además, un ejemplo de coordinación y cooperación institucional en el tramo de intervención, siendo sus socios el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), a través de sus empresas TRAGSA y TRAGSATEC; Confederación Hidrográfica del Ebro; Gobierno de La Rioja; Gobierno de Navarra, a través de Gestión Ambiental de Navarra, S.A. (GAN-NIK); Gobierno de Aragón y el Instituto Aragonés del Agua.

